martes, 24 de enero de 2012

San Francisco de Sales y el Periodismo

Hoy 24 de enero, es San Francisco de Sales, patrón de los periodistas, o sea, el patrón de mi profesión.
Nació en el Castillo de Sales, de familia noble sus padres fueron Francisco de Sales de Boisy y Francisca de Sionnaz. A los 13 años viajó a París para estudiar con los jesuitas, después a la Universidad de París y de allí a la de Padua estudiando Derecho y Teología. Su deseo de ser Sacerdote ya estaba presente pero oculto a su padre, sólo su madre y amigos íntimos lo sabían. Al terminar de estudiar un acontecimiento ayudó a su ordenación: el canónigo de Sales, Luis de Sales, ayudado por el Obispo de Ginebra, Claudio de Granier, hablaron con el Papa quien lo nombró como Deán del Capítulo de Ginebra, el nombramiento llegó de sorpresa para su padre, pero con tal nombramiento el padre aceptó la ordenación, acaecida en 1593. A partir de ese momento ejerció el sacerdocio con bastante trabajo y dedicación. Tomó como ejemplos de vida a San Francisco de Asís y a San Felipe Neri con lo que desarrolla una personalidad alegre, paciente y optimista. Sus inicios como sacerdote los ejerció entre los pobres.
En 1594, fue hacia la zona del Chablais dominada por calvinistas. En un inicio fue echado por los pobladores y tuvo que pasar temporadas viviendo en la intemperie y de manera rudimentaria evitando 2 intentos de asesinato e incluso ataques de lobos, pero su celo y trabajo empezó a dar fruto, sumado a su carácter amable y paciente y una propaganda hecha a mano y distribuida casa por casa, profunda en su contenido refutando las ideas calvinistas, logró cautivar a los pobladores y convertirlos. Francisco de Sales resumió su labor a Juana de Chantal con esta frase: Yo he repetido con frecuencia que la mejor manera de predicar a los herejes es el amor, aún sin decir una sola palabra de refutación contra sus doctrinas.
Su labor quedó manifestada con la visita del Obispo Granier 4 años más tarde cuando fue recibido por gran número de católicos, hecho que antes hubiera sido imposible. Los escritos con los que se sirvió fueron los que hicieron su primer libro de "Controversias" y revelaron el carácter de escritor de Francisco.
Con esta semblanza, quiero defender la nobleza de una profesión que siempre están en el ojo del huracán, bien porque sus profesionales no gozan del prestigio ni de la cualificación profesional que merecen y porque es objeto de la presión de la clase política, que provoca una reacción muy equivocada.
Digo esto porque creo y sé de compañer@s que sienten el periodismo como un auténtico servicio a la ciudadanía, que se tratan de ganar el pan y la credibilidad con su honestidad, la búsqueda de la verdad a través de la información constrastada y la suma de fuentes de información y en el que ama a una profesión que sigue en el disparadero y bajo la precariadad laboral. Hay periodistas que pierden su vida hoy en día por ello y que no se plegan al poder, aunque haya que convivir y cohabitar con él. Por eso ¡¡¡Viva el periodismo¡¡¡, pese a todo.